Durante una fiscalización en terreno, los inspectores constataron que el lugar carecía de agua potable, servicios higiénicos y comedor, lo que obligaba a los trabajadores a preparar sus alimentos en un fogón improvisado, sin acceso a instalaciones mínimas para su bienestar.
La directora regional del Trabajo, Carolina Ojeda, explicó que la medida busca “resguardar la salud y seguridad de las y los trabajadores, garantizando el cumplimiento de la normativa laboral vigente”. Añadió que la situación detectada “preocupa profundamente, ya que los trabajadores no contaban con lo mínimo indispensable para desarrollar sus labores de forma digna y segura”.
La empresa, ubicada junto a la ruta que une Victoria con Curacautín, no podrá retomar sus operaciones hasta que subsane todas las deficiencias detectadas por la autoridad laboral. Además, será sancionada con multas en Unidades Tributarias Mensuales (UTM) por cada una de las infracciones constatadas.
Desde la Dirección del Trabajo reiteraron su compromiso con la protección de los derechos laborales y llamaron a los empleadores del rubro agrícola a cumplir con las normativas vigentes, especialmente en lo relativo a higiene y seguridad.
